Por regla general, un lactante a base de leche materna no debería tener estreñimiento; inicialmente la frecuencia de sus deposiciones puede variar desde varias veces al día hasta una cada tres. Poco a poco, conforme madura su sistema digestivo, se irá regularizando. También, si un bebé está tomando un complemento vitamínico con hierro, probablemente sus deposiciones sean menos blandas y tengan un color verdoso, pero esto tampoco debe ser motivo de preocupación.
Durante los primeros meses de vida, la coordinación entre los movimientos del intestino y la relajación del ano pueden ser poco eficientes e inmaduros, por lo que es posible que el bebé se muestre molesto o llore, se ponga rojo intentando pujar o mueva los brazos y piernas al tratar de evacuar. Si sus heces son blandas después de esto, probablemente no haya de qué preocuparse, poco a poco le resultará más fácil.
Sin embargo, si a pesar de que solo es alimentado con leche materna o de fórmula, y sus heces son duras o secas y en bolitas, y además aparecen vetas de sangre en el pañal, hace mucho esfuerzo, se muestra molesto o llora insistentemente al tratar de evacuar, es necesario consultar al pediatra, ya que puede ser signo de deshidratación u otro problema de salud.
El estreñimiento suele presentarse con mayor frecuencia cuando en la dieta del bebé se introducen las primeras papillas, debido al cambio de alimentación, y posteriormente puede ser a causa de una alimentación pobre en fibras o en líquidos.
Algunas medidas que pueden aliviar el estreñimiento en niños que son alimentados con papillas, además de la leche materna o de fórmula, son:
-Aumentar la fibra en su alimentación con cereales integrales, y que las papillas de fruta o verdura no estén coladas.
-Que beba suficientes líquidos. Dependiendo de su edad y consultando con el médico se le podrán ofrecer jugos de frutas naturales.
-Las papillas de chícharos o ciruelas pasas pueden ser de gran ayuda contra el estreñimiento.
-Las galletas o panes integrales contienen más fibra que las hechas con harina refinada. Evita que tengan exceso de azúcares y grasas.
-Evitar el cereal de arroz y elegir de trigo integral, cebada, salvado o multigrano.
-Si el estreñimiento es ocasional y con autorización del médico, se pueden utilizar los supositorios de glicerina.
–Nunca des medicamentos que no haya recetado el médico a un bebé o niño pequeño.
-Un ligero masaje en el vientre o aumentar la actividad física también puede ayudar.
En raras ocasiones, el estreñimiento en el bebé puede ser causado por una afección más grave como la enfermedad de Hirschsprung, hipotiroidismo o fibrosis quística. Si el estreñimiento persiste a pesar de los cambios en la dieta o si va acompañado por síntomas como vómitos, desgano o debilidad, es indispensable consultar al médico.