El embarazo es una etapa llena de cambios y expectativas para la futura madre. Entre las fases más críticas se encuentra el trabajo de parto, el cual puede llevarse a cabo de manera natural o con intervenciones médicas, según las necesidades y preferencias de la madre. Conocer los signos y procedimientos asociados a este momento puede marcar una gran diferencia en la experiencia de la madre. Es fundamental estar atenta a las señales que indican el comienzo del trabajo de parto y a la evaluación de la dilatación cervical previa al parto.
Esta información no solo brinda tranquilidad, sino que también prepara a la madre para tomar decisiones informadas, asegurando un proceso más fluido y menos estresante en uno de los momentos más importantes de su vida. En este espacio te contaremos todo lo que necesitas saber sobre la medición de la dilatación previa al parto y el proceso de dilatación del cuello uterino.
Señales del inicio del trabajo de parto
Uno de los primeros pasos para las nuevas mamás es aprender a reconocer los signos del inicio del trabajo de parto. Estos pueden incluir contracciones regulares que aumentan en intensidad y frecuencia, la ruptura de la bolsa amniótica, también conocida como “romper aguas”, y la expulsión del tapón mucoso, que puede ser un indicio de que el cérvix está comenzando a dilatarse. Además, los dolores de parto, que pueden variar en intensidad y tipo, también son un indicador importante de que el trabajo de parto ha comenzado.
Es fundamental que las mujeres embarazadas mantengan una comunicación abierta y constante con su médico o personal de salud de confianza. Ellos están ahí para responder a todas sus dudas y proporcionar información crucial para preservar la salud tanto de la madre como del bebé. Además, es vital que la futura mamá esté consciente de los cambios en su cuerpo y sepa cuándo buscar una valoración médica más detallada o una intervención inmediata.
La detección temprana del inicio del trabajo de parto puede ayudar a reducir la ansiedad, la angustia y el miedo. Además, puede evitar procedimientos médicos innecesarios, lo que contribuye a una experiencia de parto más positiva y menos estresante. El conocimiento sobre los indicadores del inicio del parto también facilita el trabajo de los especialistas médicos y puede agilizar el proceso del parto.
Valoración de la dilatación previa al parto
Uno de los procedimientos clave para evaluar el progreso del trabajo de parto, ya sea un parto natural o con intervenciones médicas, es la valoración del cuello uterino mediante tacto vaginal. Este procedimiento permite al obstetra medir la dilatación del cérvix, evaluar la posición de la cabeza del bebé y determinar la amplitud de la pelvis de la madre.
Es importante que la mujer embarazada autorice este procedimiento, ya que puede ser incómodo y, en ocasiones, doloroso. Sin embargo, es una herramienta esencial para que el obstetra realice una valoración adecuada de la evolución del trabajo de parto. La información recopilada durante esta valoración es crucial para tomar decisiones informadas en beneficio de la madre y el bebé.
Es importante hacerle saber a la nueva mamá que el procedimiento de tacto vaginal no debe realizarse de manera rutinaria, sino bajo indicaciones específicas, como contracciones uterinas frecuentes, sangrado vaginal sin la presencia de placenta previa, o para identificar la cercanía del trabajo de parto en un embarazo a término.
Otro punto muy importante por destacar es que el médico que realice el tacto vaginal debe mostrar siempre una actitud respetuosa, realizarlo bajo estándares específicos de higiene, informar adecuadamente a la paciente acerca del procedimiento y describirle detalladamente los hallazgos.
¿Qué esperar durante esta valoración?
Durante el trabajo de parto el médico utilizará sus dedos índice y medio para medir la dilatación del cérvix. Con guantes y lubricante, el médico identificará los bordes del cuello uterino y determinará su consistencia y la dilatación aproximada. Esta información, junto con la evaluación de la vitalidad del bebé, permitirá al médico determinar la fase del trabajo de parto y tomar decisiones conjuntas con la madre.
Una vez que la madre haya ingresado a la sala de labor y se confirme que está en la fase activa del trabajo de parto, las valoraciones del cuello uterino se realizarán con más frecuencia, cada hora o cada media hora, según lo considere necesario el médico. Esto permite un monitoreo continuo del progreso y asegura que tanto la madre como el bebé estén en buen estado.
La importancia de un entorno de confianza
Es crucial que la futura mamá se encuentre en un entorno donde se sienta segura y cómoda. Elegir un médico y un centro de atención que cumplan con sus expectativas puede tener un impacto significativo en su experiencia de parto. La confianza en el equipo médico y en el entorno puede ayudar a reducir el estrés y la ansiedad, lo cual es beneficioso para el bienestar emocional y físico de la madre. Además, es esencial que esté bien informada sobre su cuerpo, su condición y las características de su embarazo. Esto le permitirá tener expectativas realistas y saber qué esperar cuando el momento del parto se acerque.
Consejos prácticos
Estos son algunos tips que podrían ayudar a la nueva mamá a prepararse para el trabajo de parto:
- Educación prenatal. Asistir a clases de preparación para el parto puede proporcionar información valiosa, así como técnicas para manejar el dolor y el estrés durante la labor.
- Plan de parto. Elaborar un plan de parto en conjunto con el médico puede proporcionar a la madre una sensación de mayor preparación y control sobre su experiencia.
- Ejercicio y alimentación. Mantenerse activa y llevar una dieta equilibrada puede contribuir a una mejor salud física y emocional durante el embarazo y el trabajo de parto.
- Técnicas de relajación. Practicar técnicas de relajación, como la respiración profunda, la meditación y el yoga, puede ayudar a la madre a manejar el dolor y la ansiedad durante la labor de parto.
- Apoyo emocional. Contar con el apoyo de la pareja, familiares o una doula puede proporcionar un respaldo emocional invaluable durante el trabajo de parto.
Como podrás darte cuenta, la preparación y el conocimiento son herramientas poderosas para la nueva mamá durante el embarazo y el trabajo de parto. Reconocer los signos del inicio de esta labor y comprender la importancia de la valoración de la dilatación del cérvix pueden hacer una gran diferencia en la experiencia de parto. Además, estar en un entorno de confianza y recibir el apoyo necesario puede contribuir significativamente al bienestar de la madre y el bebé.
Recordemos que las etapas de embarazo y parto son experiencias únicas y transformadoras. Con la información adecuada y el apoyo necesario, la futura mamá podrá enfrentar este momento con mayor confianza y tranquilidad, asegurando así una experiencia positiva y segura para ella y su bebé.
Referencias
Norma Oficial Mexicana NOM-007-SSA2-2016, Para la atención de la mujer durante el embarazo, parto y puerperio, y de la persona recién nacida. Consultada en https://www.dof.gob.mx/nota_detalle.php?codigo=5432289&fecha=07/04/2016#:~:text=1.1%20Esta%20Norma%20tiene%20por,y%20a%20la%20persona%20reci%C3%A9n%20nacida.
Carvajal C.J., Ralph T. C. Manual de Obstetricia y Ginecología. Novena edición. 2018.