Es importante atenderlas a tiempo para evitar complicaciones. Estas señales pueden indicarte si a tu hijo le cuesta respirar:

• Cuando no respira bien por la nariz lo hace abriendo la boca. Esto es causado por un engrosamiento de las adenoides, el cual se presenta después de que el bebé ha tenido una serie de resfriados.
• Sin embargo, si se queda en apnea durante el sueño -deja de respirar por unos segundos- significa que la obstrucción es más fuerte y debes llevarlo al pediatra.
• Otras señales son el “hundimiento” del pecho o el movimiento de las paredes laterales de la nariz al respirar. En estos casos, llévalo de inmediato a urgencias.