Hablamos de pérdida espontánea cuando hay una pérdida del embarazo antes o durante las primeras 20 semanas de gestación. La pérdida espontánea es más común de lo que pensamos, entre el 10 y el 20 % de los embarazos terminan con una pérdida de embarazo.
Los últimos datos proporcionados por el INEGI mencionan que en 2022 se registraron 25,041 muertes fetales, que corresponden a una tasa nacional de 72.2 por cada 100 mil mujeres en edad fértil.
Una de las causas más recurrentes es porque el feto no se está desarrollando como debería. Hay múltiples explicaciones sobre por qué ocurren estás pérdidas; que pueden ir desde problemas con los genes o cromosomas o por afectaciones de salud materna.
Los problemas cromosómicos pueden causar un embarazo anembrionado (es decir, cuando no hay ningún embrión), una muerte fetal intrauterina (el embrión deja de desarrollarse antes de presentar síntomas de la pérdida), embarazo molar/ molar parcial (ambos conjuntos de cromosomas son del padre/ crecimiento anormal en la placenta)
En el caso de las afectaciones de salud materna como factores de riesgo, podemos enumerar más de una posible causa. Tenemos como ejemplos la diabetes no controlada, problemas hormonales, problemas en el útero o cuello uterino, tiroides, y muchas otras que podrían terminar en la pérdida de embarazo.
Cuando se presenta una pérdida espontánea puede suceder que haya un manchado o sangrado vaginal, dolor o calambres en el abdomen o en la región lumbar o líquido e incluso tejido que pudiera ser expulsado de la vagina.
¿Existe prevención para la pérdida espontánea?
Aunque no haya una forma de prevenir o conocer la probabilidad de tener una pérdida espontánea, es importante seguir los cuidados adecuados para que esa probabilidad sea lo menor posible dependiendo de cada caso; recuerda, cada mamá y cada embarazo es diferente.
Realizarse exámenes prenatales antes de planear el embarazo es algo que se omite o definitivamente se ignora en la mayoría de los embarazos planificados; sin embargo, es esencial a la hora de prevenir algún tipo de complicación que pueda surgir.
Acudir con regularidad a las consultas de atención prenatal también es una forma de prevenir: estar al pendiente del crecimiento y desarrollo del embarazo detectará a tiempo cualquier complicación y permitirá suministrar un tratamiento oportuno, según sea el caso.
Otra recomendación, completamente responsabilidad de la nueva mamá, es seguir las recomendaciones básicas para cuidar de su embarazo: evitar fumar, beber alcohol, consumir drogas; tomar complejo multivitamínico; limitar el consumo de cafeína.
Diagnósticos y análisis
Para poder diagnosticar el riesgo de una pérdida espontánea se realizan varios análisis clínicos. Entre los que se encuentran, por ejemplo, la realización de un examen pélvico que permitirá al especialista vislumbrar si el cuello uterino se está dilatando o si hay tejido / sangre en la abertura del cuello o en la vagina.
Otro análisis es el de sangre, donde se revisará el nivel de la hormona del embarazo (HCG). Este determina si el embarazo continúa en desarrollo. Por último, una ecografía, para determinar si el saco amniótico está en buenas condiciones.
Los procedimientos para abordar una pérdida espontánea son diversos. Entre ellos se encuentra esperar a que el tejido del embarazo salga por sí solo. Otro se da con la ayuda de medicamentos, proporcionados por el especialista de la salud; estos propiciarán que el útero se contraiga y salga el tejido existente formado durante el embarazo.
Una última alternativa es un procedimiento de succión. Con ayuda de un especialista de la salud, se inserta un tubo delgado en el útero y se retira el tejido del embarazo con una suave succión.
Después de vivir una pérdida espontánea las formas de vivirlo y afrontarlo son distintas para cada mujer. Cada duelo es algo muy personal, el cuidado físico y mental será esencial. Para cada mamá sentir y vivir el duelo es parte del proceso (a su manera única, cada duelo es diferente).
Tratar de rodearse de personas que comprendan y validen la pérdida y la forma en cómo se vive el duelo ayuda a vivir el proceso de manera sana. Tener un lugar donde se pueda expresar el dolor y la tristeza sin juicios y pueda brindar tranquilidad y consuelo.
Hablar de los sentimientos y pensamientos en pareja o con amigos y familia, mostrar vulnerabilidad es parte del proceso. El tiempo de duelo es diferente en cada caso, eso sólo lo podrá determinar la pareja.
Si se desea iniciar el camino al embarazo nuevamente, un especialista de la salud podrá ayudar a planificar y monitorear las medidas necesarias para intentarlo nuevamente y poder elegir un momento adecuado para una nueva oportunidad, redirigir a una clínica de fertilidad o dependiendo del caso, la alternativa de un método anticonceptivo si ya no hay planes de volverlo a intentar (al menos en ese momento).
Conoce más:
| 1. | Mayo Clinic. Pérdida espontánea[Internet].; 2021 [Consultado el: 2023 febrero 20. Disponible en: https://www.mayoclinic.org/es/diseases-conditions/pregnancy-loss-miscarriage/symptoms-causes/syc-20354298. |
| 2. | Planned Parenthood. Pérdida Espontánea. [Internet].; 2024 [Consultado el: 2024 febrero 20. Disponible en: https://www.plannedparenthood.org/es/temas-de-salud/embarazo/aborto-espontaneo. |
| 3. | R.I RdD. Pérdida Espontánea. Liberabit. Revista Peruana de Psicología. 2012; 18(1): 53-57. |
| 4. | Patiño E, Porzio M. Frecuencia de pérdidas espontáneas en pacientes que acuden al servicio de Gineco-Obstetricia del Hospital de Clínicas. Medicina Clínica y Social. 2021; 5(2): 76-79. |
| 5. | INEGI. ESTADÍSTICAS DE DEFUNCIONES FETALES (EDF) 2022. [Internet]. México; 2023 [Consultado el: 2024 febrero 20. Disponible en: https://www.inegi.org.mx/contenidos/saladeprensa/boletines/2023/EDF/EDF2022.pdf. |
