Entre las cosas que debemos tener antes de la llegada del bebé a casa, es un asiento de coche. Siempre será más seguro llevar a un bebé, aun siendo recién nacido, en una sillita especial para instalar en el auto, que en brazos.
Además, por ley en nuestro país los menores de 12 años deben ir en el asiento trasero del coche, y los menores de 4 años en una silla de seguridad, adecuada a su peso y edad, que debe estar instalada en el asiento trasero.
Por ejemplo, en la Ciudad de México, el artículo 39 del Reglamento de Tránsito establece que quien no cumpla con estas medidas de seguridad para menores, puede hacerse acreedor a una multa que va desde los $434.00 hasta los $868.00 pesos, en el año 2020.
Pero evidentemente, tomar las medidas de seguridad para cuidar a los pequeños debe ser la motivación principal para utilizar un asiento para el coche, que los mantenga protegidos. Esta debe cumplir con los estándares mínimos de seguridad. Lo óptimo, por ser más actuales, son aquellas que cuentan con un sistema de fijación ISOFIX, que es un estándar ISO de sujeción para sillas de seguridad para menores, a través de dos anclajes rígidos en el vehículo y dos en el sistema de retención infantil. Sin embargo, si por cualquier razón esto no es posible, un asiento que se fija con el cinturón de seguridad del auto ofrece excelente confiabilidad.
El peso y la edad del bebé se deben considerar al adquirir una sillita para el auto, además de que al paso de los meses esta deberá ser cambiada por una más acorde a su nuevo peso y talla.
-Grupo 0: Es una silla para recién nacidos y puede ser utilizada hasta que el menor alcance un peso de 10 kilos. La silla debe ser puesta mirando hacia atrás. La mayoría se pueden utilizar también como un portabebé.
–Grupo 0+: Es una silla para bebés desde los 9 hasta los 13 kilos de peso y también se monta mirando hacia atrás.
–Grupo 1: Es una silla es para niños de 9 meses hasta los 4 años, con un peso máximo de 18 kilos y debe ir instalada mirando hacia adelante.
Algunas recomendaciones adicionales son:
-Utilizar siempre asientos para bebé en buen estado, y de preferencia contar con el manual de instrucciones.
-Nunca utilizar asientos que hayan estado en el auto durante un accidente.
-Si es posible, evitar adquirir asientos de más de 6 años de antigüedad, ya que el plástico del que están hechos tiende a deteriorarse con el sol y el paso del tiempo.
-Siempre instalar el asiento siguiendo estrictamente el manual de instrucciones.
-Instalar el asiento de bebé en la plaza central del asiento trasero del coche, ya que es la más segura por estar más alejada de cualquier zona de impacto en caso de accidente.
-Nunca se debe instalar en el asiento del copiloto, salvo en autos que no tienen asiento trasero, y en tal caso se debe desactivar la bolsa de aire de esa plaza.
-Siempre, por más corto que sea el viaje, ajustar perfectamente al bebé dentro de su sillita, y verificar que esta esté bien sujeta al asiento del coche, según las instrucciones de uso.
Recuerda que la salud y la vida es lo más importante, que a cualquiera le puede pasar un accidente y que el bienestar de los hijos no tiene precio.
