La dentición es el proceso en el cual surgen los dientes de leche de un bebé. Esto suele suceder entre los cinco y los nueve meses de edad, aunque en algunos bebés aparece el primer dientecito tan pronto como a los tres meses o tan tarde como al año, pero no debe ser motivo de preocupación.
Aunque es emocionante ver su primer dientecito en su encía, para que esto sucediera, probablemente el bebé tuvo que padecer alguno o varios de los síntomas típicos de la dentición y sus papás con él. Cada bebé es diferente y algunos no tienen ninguna molestia, pero otros lo pasan mal.
Los síntomas más comunes en la etapa de dentición incluyen:
- Babear
- Fiebre baja o diarrea
- Erupciones en la barba o la cara
- No puede dormir o despierta en la noche
- Un poco de tos
- No quiere comer
- Dolor, molestia o irritabilidad
- Se muerde con desesperación las manos o lo que tenga a su alcance
Los síntomas más molestos suelen hacerse menores o desaparecer después de los primeros 4 dientes, aunque el babeo y la necesidad de morder todo puede continuar más allá del primer año de edad.
En la mayoría de los casos, aunque no en todos, inicialmente surgen los dos dientes frontales inferiores y después los superiores. Más tarde aparecen los otros incisivos, los molares superiores e inferiores, los caninos y finalmente los molares laterales inferiores y superiores. Por regla general, a los tres años de edad deben haber brotado los veinte dientes que componen la dentadura temporal o de leche.
Los dientes de leche sí son importantes ya que marcan la posición de los dientes definitivos y pueden desarrollar caries. Para prevenir esto y crear buenos hábitos de higiene, limpia los dientes de tu bebé con un cepillo de dientes especial para su edad después de cada comida. No es necesario usar pasta dental, restregar demasiado fuerte o enjuagar, solo hay que tratar de eliminar el exceso de alimento de sus dientecitos.
Evita también que el bebé se duerma con el biberón, o que el uso del chupón se prolongue más allá del año de edad. De igual forma, es recomendable postergar y limitar lo más posible los jugos envasados, otras bebidas azucaradas y los dulces.
Para ayudar a tu bebé a pasar por este duro momento y minimizar las molestias, puedes ofrecerle una mordedera, perfectamente limpia, o consultar a su médico acerca de algún analgésico que lo pueda ayudar a enfrentar la incomodidad y el dolor.
