El bebé crece, aprende a sentarse, se levanta, da vueltas, se pone de pie, se agarra de los barrotes de la cuna y, desde hace algunas semanas, no para de arrastrarse y de gatear por todos los rincones de la casa. Su sentimiento de libertad es contagioso.
El poder moverse es divertido y un paso importante en el desarrollo de sus destrezas y confianza. El bebé ya no para de moverse. Ahora se distrae sosteniéndose en los muebles y en todo lo que pueda para buscar apoyo y estar de pie por más tiempo, y así poder interactuar con las personas y las cosas.
Falta muy poco para que él camine por sí mismo. Falta poco para que ustedes, papás, se sitúen a una distancia de él y lo llamen para que camine hacia ustedes. El bebé irá sonriendo y dará un paso tras otro, hasta poder abrazarlos. Esto los hará sentir los padres más felices del mundo y su bebé estará cumpliendo una etapa más de su crecimiento.
Les compartimos algunos divertidos juegos, para que su bebé comience a dar sus primeros pasos.
Siguiendo la pista
Quita los objetos peligrosos de tu mesa de centro y sustitúyelos por sus juguetes preferidos. Colócalos bien separados unos de otros. Agarrado con una mano a la mesa, tu bebé se irá trasladando para cogerlos y tirarlos. Y cuando tenga uno en la mano, ¿cómo alcanzará el siguiente sin soltarlo? ¿Lo dejará en el suelo antes de coger el otro? Subir y bajar es un buen ejercicio. Pero en algún momento tratará de hacer todo a la vez. Los primeros intentos de mantener el equilibrio sin apoyo están asegurados.
¡Ven con mamá!
Es el juego clásico que funciona muy bien. Colócate frente a él con los brazos extendidos, llámalo o capta su atención mostrándole un juguete atractivo. Antes o después de tomar el objeto se lanzará a tus brazos. Recuerda que el truco consiste en ir alejándote un poco más cada día para que tenga que dar más pasos antes de encontrar tu abrazo.
¡A que no me atrapas!
Se trata de la continuación del juego anterior. Anímalo a que te atrape. Con los brazos extendidos hacia él, ve caminando hacia atrás. No olvides felicitarlo cuando lo consiga.
Por la barandilla
Amarra una cuerda a lo largo de un pasillo para que tu bebé pueda sujetarse de ahí y recorrer de un extremo al otro el pasillo; si coincide con que pasa frente a un espejo será muy divertido.